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Afortunadamente, el mundo avanza. Y con esto no solo nos referimos al plano científico y tecnológico, sino también social. Y en este aspecto, uno de los progresos más grandes que hemos logrado como sociedad ha sido el de, pese a que todavía queden muchas cosas que mejorar, lograr que la figura de la mujer sea respetada. Porque aunque siga habiendo problemas a solucionar, si echamos la vista atrás, ha sido mucho el camino que hemos recorrido.
Antes de que a mediados del siglo XVIII naciera, en el contexto de la Ilustración y de la Revolución Industrial, el movimiento feminista, históricamente los hombres han ejercido superioridad sobre la mujer, considerando a esta como un ser inferior que no tiene los mismos derechos que los varones. La mujer ha vivido oprimida por el machismo.
Una ideología que engloba todas aquellas prácticas sociales, actitudes, creencias y conductas que promueven la superioridad del hombre sobre la mujer, pudiendo encontrar las raíces de este machismo ya en las sociedades primitivas donde las mujeres se encargaban simplemente de cuidar a la descendencia. Pero con el tiempo, este derivó en el no acceso al voto, la violencia de género, las diferencias salariales y muchas otras formas de discriminación.
Es evidente que, gracias al trabajo del movimiento feminista, el machismo cada vez está menos presente en las sociedades. Pero tampoco podemos cerrar los ojos ante la evidencia de que las conductas machistas siguen existiendo. Por ello, para darnos cuenta de esta triste situación y para poder ser capaces de detectar estas actitudes, en el artículo de hoy vamos a analizar los distintos tipos de machismo. Empecemos.
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¿Qué clases de machismos existen?
El machismo es la ideología que promueve la superioridad del hombre sobre la mujer a través de las conductas, actitudes, creencias y prácticas sociales que consideran a la mujer un ser inferior simplemente por ser mujer. Esta ideología machista se aplica a todos los ámbitos de la vida, relegando a la mujer a un papel secundario y viéndola únicamente como cuidadora del hogar y de los hijos.
Pero más allá de esta sobresimplificada definición, debemos tener muy claro que el machismo no se expresa siempre del mismo modo. Y hay veces incluso que lo hace de maneras que, ya sea por desconocimiento o porque simplemente las tenemos muy arraigadas, ni siquiera nos damos cuenta de que son machistas.
De ahí que muchas veces el machismo sea difícil de identificar. Pero precisamente lo que tenemos que hacer si queremos seguir combatiendo uno de los mayores males de la sociedad es aprender a detectar las conductas machistas para castigarlas. De este modo, seguiremos avanzando en el camino hacia una sociedad feminista donde todos seamos iguales. Por ello, vamos a ver cómo se clasifica el machismo.
1. Machismo familiar
El machismo familiar es aquel que se da en el contexto de las familias que tienen una muy marcada estructura patriarcal donde la mujer tiene más obligaciones y restricciones que el hombre, el cual goza de todos los privilegios de vivir en el hogar. En la familia, hay una dominación masculina, con un reparto desigual de las tareas domésticas y con un control de las cuentas económicas por parte del hombre.
2. Machismo histórico
El machismo histórico es aquel que consiste en omitir u ocultar la importancia de la mujer en actos relevantes para la historia. Así, se intenta borrar el legado de las mujeres que participaron en la ciencia, la política o revoluciones sociales. Es un machismo que quiere reescribir la historia para que parezca que solo los hombres han sido importantes.
3. Machismo social
El machismo social es aquel que se manifiesta considerando a la mujer como un simple cuerpo que se exhibe para el disfrute del hombre. Y es que a nivel de sociedad, la mujer ha sido muchas veces considerada simplemente eso: un trozo de carne.
4. Machismo sexual
El machismo sexual, también conocido como íntimo, es aquel que se basa en considerar que, durante las relaciones sexuales, la mujer debe adoptar una conducta pasiva y sumisa. Esta forma de machismo considera que el sexo solo está hecho para el disfrute del hombre, por lo que niega el deseo femenino.
5. Machismo intelectual
El machismo intelectual es aquel que se basa en considerar que la mujer es menos capaz a nivel intelectual de desenvolverse en determinados ámbitos por el simple hecho de ser mujer. En otras palabras, es creer que la mujer es más tonta que el hombre. Uno de los más claros ejemplos es el de decir que las mujeres no saben conducir.
6. Machismo religioso
El machismo religioso es aquel que tiene su origen en el seguimiento de las conductas machistas promulgadas por los escritos sagrados de una religión. Y es que las grandes religiones, de seguir sus pautas al pie de la letra y de interpretar los escritos de forma literal, encierran muchos comportamientos machistas que se vuelven extremos en determinados casos que no hace falta mencionar. Del mismo modo, la escasa presencia de la mujer en las organizaciones eclesiásticas también se considera machismo religioso.
7. Machismo tradicional
El machismo tradicional es aquel que se basa en la tradición y que, generalmente, no se desarrolla con maldad. Y es que son ideas que, pese a ser machistas, las tenemos tan integradas a causa del legado tradicional que ni siquiera nos damos cuenta de que son opresivas para las mujeres. Un claro ejemplo es el de preguntarle a una mujer adulta que cuándo piensa casarse y tener hijos.
8. Machismo por misoginia
El machismo por misoginia es aquel que se desarrolla por el odio hacia la mujer. Así pues, se basa en emociones negativas hacia la mujer que se traducen en un discurso de odio que, evidentemente, a su vez se manifiesta con comportamientos machistas. Es decir, aquí no es por tradición, es porque un hombre odia a las mujeres.
9. Machismo personal
Por machismo personal entendemos todas aquellas actitudes machistas que son perpetradas por un solo individuo. Es decir, un hombre o una mujer (no olvidemos que las mujeres también pueden ser machistas) desarrolla comportamientos machistas pero de forma personal, sin estar organizado en ningún grupo.
10. Machismo institucional
En contraposición, el machismo institucional es aquel en el que las actitudes machistas no se fundamentan solo en el individuo, sino que son perpetradas por un grupo de estructura formal que comparte estas ideas machistas. Los partidos políticos que abogan por relegar a la mujer a un papel inferior son el mejor ejemplo de esta forma de machismo.
11. Machismo paternalista
El machismo paternalista es aquel que se basa en adoptar actitudes de sobreprotección con la mujer. Y aunque pueda considerarse como algo de buena intención, lo cierto es que proteger de más a la mujer solo demuestra que la estamos considerando como un ser inferior incapaz de cuidar de sí misma. Creer que la mujer tiene que ser protegida por el hombre tiene, evidentemente, un trasfondo sexista.
12. Machismo cultural
El machismo cultural es aquel que se basa en una poca presencia de la mujer en las manifestaciones culturales. Así pues, cuando vemos que hay pocas directoras de cine, poca representación de la mujer en exposiciones de mujeres, pocos premios de literatura ganados por mujeres, etc, estamos ante esta forma de machismo que restringe el acceso de la mujer a tener los mismos privilegios que el hombre en el ámbito de la cultura.
13. Machismo violento
El machismo violento es aquel que se expresa con una apología de la violencia contra la mujer y, en el peor de los casos, con actos de agresiones físicas hacia la mujer. Así pues, estamos hablando del machismo que se basa en la violencia de género. El hombre hace uso de su fuerza física para, a través de la violencia, ejercer dominio sobre la mujer.
14. Machismo lingüístico
El machismo lingüístico es aquel que se basa en aquellas expresiones que no representan a la mujer o que tienen un significado peyorativo cuando se aplican al género femenino. Es decir, cuando se afirma que el masculino es el genérico o cuando algunos significados del diccionario tienen acepciones negativas cuando es para el género femenino pero no para el masculino, estamos ante esta forma de machismo.
15. Machismo fisiológico
El machismo fisiológico es aquel que se basa en menospreciar todo lo que tiene que ver con la anatomía y psicología de la mujer. Esto engloba desde decirle a una mujer que está enfadada porque tiene la regla o afirmar que todas son unas histéricas hasta la poca investigación científica de los problemas de salud femeninos.
16. Machismo emocional
El machismo emocional es aquel que se basa en considerar que las mujeres son incapaces de manejar sus emociones. Así pues, todas aquellas ocasiones en las que decimos que las mujeres son irracionales, que son más emocionales, que son incapaces de ser independientes emocionales y que siempre están llorando, son momentos de machismo emocional.
17. Machismo académico
El machismo académico es aquel que se basa en la poca presencia de la mujer en altos cargos universitarios y/o de investigación. En otras palabras, la infrarrepresentación de mujeres académicas en campos tanto científicos como sociales es una forma de machismo que se da en el mundo de las universidades y centros de investigación.
18. Machismo educativo
El machismo educativo es aquel que se basa en dar a las nuevas generaciones todo tipo de ideas que contribuyen a seguir con los comportamientos machistas en la sociedad. Cuando los refranes machistas se siguen extendiendo, se invisibilizan las aportaciones de la mujer en la ciencia, se orienta a las niñas a determinados oficios, etc, se está instaurando el machismo en la educación.
19. Machismo económico
El machismo económico es aquel que se basa en poner dificultades a la mujer en el plano de la economía. Estamos hablando, pues, de menor acceso a puestos altos de dirección, menor sueldo, brecha salarial, infravaloración de las capacidades laborales, menos oportunidades, problemas referidos a si se queda embarazada…
20. Machismo legislativo
El machismo legislativo es aquel que se expresa a través de las leyes. En algunos países no existen leyes que reconozcan a las mujeres como ciudadanas con derechos, negando el derecho a voto, limitando sus libertades, recibiendo castigos diferentes, etc. Cuando la propia legislación del país promueve el machismo, estamos ante esta forma de machismo.
