Los 5 tipos de Aburrimiento (y sus características)

El aburrimiento es un estado emocional desagradable que se desencadena cuando no conseguimos estar implicados en una actividad que nos provoque satisfacción, cosa que deriva en un decaimiento anímico.

tipos-aburrimiento

Para bien y para mal, las personas somos seres emocionales. Y es que las emociones, que se desencadenan como una forma de adaptación ante la presencia de determinados estímulos, son reacciones psicofisiológicas que nos ayudan a relacionarnos con nosotros mismos y con el entorno que nos rodea. Son respuestas a la realidad que tenemos a nuestro alrededor.

Alegría, tristeza, melancolía, miedo, amor, angustia, vergüenza, enfado, admiración… Son muchas las emociones, tanto primarias (aquellas más innatas y ligadas a un propósito de supervivencia) como secundarias (aquellas más complejas que requieren de procesamientos mentales superiores), que los seres humanos podemos experimentar.

Y aunque no haya emociones buenas ni malas, pues todas cumplen con una función adaptativa, lo cierto es que hay una en particular que todos detestamos experimentar. Un estado emocional desagradable que se desencadena cuando no conseguimos estar implicados en una actividad que nos genere satisfacción, cosa que deriva en un decaimiento anímico. Estamos hablando del aburrimiento.

A nadie le gusta estar aburrido, pues lo interpretamos como un estado en el que perdemos nuestro tiempo. Y pese a que creemos que es una emoción universal que se expresa de una única forma, lo cierto es que dependiendo de cómo se manifiesta y de cómo imperen los rasgos de nuestra personalidad, pueden definirse distintas clases de aburrimiento. Y esto es precisamente en lo que vamos a indagar en el artículo de hoy.

¿Qué es el aburrimiento?

El aburrimiento es un estado emocional desagradable que emerge cuando no conseguimos implicarnos en una actividad que nos provoque satisfacción. Nos sentimos aburridos cuando, pese al deseo por hacerlo, no logramos vernos inmersos en una situación activa que nos genere placer, algo que deriva en el decaimiento anímico propio de esta emoción.

Así pues, podemos entender el aburrimiento com la sensación de fastidio generada por la falta de interés o de diversión por el entorno y actividades que nos rodean, pues los estímulos que percibimos no son suficientes como para provocarnos satisfacción sensorial, mental o física. Nos aburrimos cuando nada en el momento presente nos llena.

Nos sentimos aburridos cuando se genera en nuestra mente un estado emocional reactivo cuando el cerebro interpreta que la condición del ambiente se fundamenta en estímulos repetitivos, tediosos e incluso inexistentes. Así, el aburrimiento deriva de la falta de cosas interesantes para hacer, ver o escuchar.

No lograr entretenimiento cuando lo buscamos. En esto se basa el aburrimiento. Una emoción secundaria de una elevada complejidad psicológica que todos, por el decaimiento anímico que provoca, queremos evitar. Y es que esta reacción, al fin y al cabo, es una llamada del cerebro, que nos empuja a buscar estímulos satisfactorios.

No debe sorprendernos, pues, que gran parte de nuestro progreso humano haya ido encaminado a buscar formas de evitar el aburrimiento. Y es que en esta búsqueda se encuentra, en parte, la explicación a por qué muchas formas de entretenimiento existen, como el cine, las series, los libros, los videojuegos y los propios pasatiempos existen. Para evitar estar aburridos.

que-es-aburrimiento

Y es que si bien no sea una emoción negativa (ninguna emoción es buena ni mala), lo cierto es que combatir el aburrimiento y buscar formas de entretenernos es algo positivo. Y es que está demostrado que estar aburridos nos hace más propensos a realizar acciones impulsivas y sin sentido. De hecho, hay estudios que indican que muchos accionistas, cuando se aburren, compran o venden sin razón, con las consecuencias económicas que esto puede tener para ellos.

Del mismo modo, muchos psicólogos señalan que, entre los muchos factores que lo determinan, el aburrimiento, la falta de estímulos y la carencia de ambiciones es lo que lleva a los niños a cometer travesuras y, ya en un plano más grave, es en parte lo que explica la entrada en el mundo del alcohol y de las drogas durante la adolescencia.

Cuando estamos aburridos, es fácil sentir que perdemos el tiempo y que nada de lo que hacemos tiene sentido. Por ello, si bien el aburrimiento puntual no es para nada negativo y, de hecho, separarnos un poco de la continua avalancha de estímulos del mundo actual puede ser positivo para nuestra salud mental, no debemos desdeñar las posibles complicaciones en las que un aburrimiento cronificado puede derivar.

De ahí que un equipo de científicos de la Universidad de Constanza (Alemania), de la Universidad de Educación de Maestros de Turgovia (Suiza) y de la Universidad de la Ciudad de Nueva York presentaran en 2021 un estudio que, tras siete años de investigación, permitió identificar las distintas manifestaciones del aburrimiento en función de sus bases psicológicas. Y esto es precisamente en lo que vamos a indagar a continuación.

¿Qué clases de aburrimiento existen?

Como venimos comentando, existen muchas formas de sentirse aburrido. Y es que este estado reactivo, como emoción secundaria que es, guarda una gran complejidad psicológica. Por ello el estudio que hemos mencionado fue tan enriquecedor, pues por fin disponemos de una clasificación científica del aburrimiento. Veamos, pues, cuáles son los 5 principales tipos de aburrimiento.

1. Aburrimiento reactivo

El aburrimiento reactivo es aquella modalidad en la que este estado emocional de indiferencia desencadena una reacción psicofisiológica en la persona que la empuja a buscar alternativas para encontrar estímulos que generen entretenimiento y distracción. Así, sentirse aburrido es una motivación para salir de este estado de “perder el tiempo”, viviendo el aburrimiento como una señal para evitar que este estado se mantenga o se repita en el tiempo.

Como está claro, este aburrimiento depende de la motivación que tenga la persona y de su estado emocional general, pues no siempre, al estar y sentirnos aburridos, tenemos esa energía para salir de él y evitar que este estado sea constante. Pero, en personas que sí que pueden encontrar esta motivación, el aburrimiento reactivo es una especie de señal que nos empuja a ser más activos y a encontrar alternativas para abandonar dicho aburrimiento, aprovechando más el tiempo.

Generalmente, ese aburrimiento se relaciona con una situación que ha desencadenado este decaimiento anímico, estando con algo de tristeza o de irritabilidad. Pero es precisamente la experimentación de este estado de aburrimiento lo que nos lleva a luchar para salir de este bucle.

2. Aburrimiento indiferente

El aburrimiento indiferente es aquel que quienes lo experimentan sienten una necesidad de aislarse socialmente. Este estado de decaimiento emocional viene ligado a la indiferencia, sin ninguna motivación para salir del aburrimiento y encontrar actividades que nos generen placer. No tiene por qué ser malo, pues hay veces en las que necesitamos aislarnos de todo y “perder el tiempo” de forma indiferente.

Aun así, pese a que este aburrimiento indiferente pueda ser positivo para, en ocasiones, alcanzar un necesario estado de relajación, es importante que exploremos si este aislamiento e indiferencia no emerge de alguna emoción dañina de fondo y que no se convierta en un estado crónico que nos impida relacionarnos con nuestro entorno personal y profesional.

aburrimiento-indiferente

3. Aburrimiento apático

El aburrimiento apático es aquel que, como su propio nombre indica, está asociado con una problemática apatía, es decir, la patológica falta de emoción, interés, motivación y entusiasmo para con la vida que nos rodea. Se trata de la forma más dañina de aburrimiento, pues estando ligado a altos niveles de hostilidad pero bajos de excitación, las personas que lo despliegan suelen evitar el contacto con otras personas y a tener malas relaciones interpersonales durante el tiempo que dura este estado.

Además, cabe destacar que se ha demostrado que quienes tienen este aburrimiento apático suelen mostrar también sintomatología propia de la indefensión y de la depresión, especialmente en aquellos casos más crónicos. Por ello, es importante que si vemos algún problema se busque atención de un profesional de la Psicología.

El mismo estudio del que hablábamos al principio señala que aproximadamente el 35% de las experiencias de aburrimiento que sentimos están estrechamente ligadas con la apatía, por lo que es muy importante que todos exploremos nuestra salud mental.

4. Aburrimiento de búsqueda

El aburrimiento de búsqueda es aquel en el que este estado de sentirse aburrido va ligado a un malestar emocional con sentimientos de inquietud y de arrepentimiento, por lo que se buscan constantemente alternativas para eliminar este estado. Así pues, se fundamenta en la búsqueda de distracciones, pensando constantemente en qué actividades pueden sacarnos de este aburrimiento.

No debemos olvidar que, si bien es normal, cuando esta búsqueda constante de estímulos se convierte en algo que nos impide estar “sin hacer nada” es posible que de fondo haya algún problema y habría que determinar qué es lo que nos empuja a estar todo el tiempo intentando encontrar planes para no estar a solas con nosotros mismos.

5. Aburrimiento de calibración

El aburrimiento de calibración es aquel que está más ligado a la incertidumbre. La persona entra en un bucle en el que quiere hacer algo para dejar de estar aburrida pero no sabe el qué. Existe malestar por sentirse y verse aburrido pero no se buscan alternativas para escapar de este aburrimiento. Ahora bien, si se les ofrece una, suelen estar abiertos a ella. Y es que a pesar de que no haya claridad en qué hacer, la persona está abierta a salir del aburrimiento.

aburrimiento-calibracion
Comparte:
¿Te ha gustado?
MédicoPlus Logo
MédicoPlus te acerca al mundo de la medicina. Rigor científico y médico en cada artículo. Contacta con tu médico y mejora tu salud en tu portal especializado de confianza.
  • Estilonext
  • azsalud

Suscríbete a
nuestra newsletter

Cada semana te enviamos tips de salud,
nutrición, noticias y más.

Puedes darte de baja cuando quieras.

© Copyright 2024 MédicoPlus. Todos los derechos reservados.Aviso legal,política de privacidad,cookies