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Cada uno de nosotros poseemos un estilo de personalidad único y diferente. Esto, en conjunción con nuestras experiencias e historia de vida, condiciona nuestra manera de comportarnos en todo tipo de situaciones. Aunque todas las formas de ser son igual de válidas, la realidad es que las personas tímidas suelen sufrir muchas veces por su estilo retraído a la hora de interactuar con otras personas. En otras palabras, la timidez no goza de muy buena fama.
Cuando una persona tímida afronta una situación social, su inhibición hace que los demás caigan en el error de pensar que se trata de alguien inseguro, altivo e incluso desagradable, cuando no necesariamente es así. La imagen de las personas tímidas muchas veces no es correcta, pues en ellas no hay un defecto que corregir ni un problema psicológico. Simplemente, poseen un estilo de relación tan válido como el de las personas más extrovertidas.
Si tienes cerca de ti a una persona tímida y desconoces cómo aproximarte a ella, en este artículo podrás encontrar algunas pautas para manejar la comunicación de la manera más eficaz sin generar situaciones incómodas o molestas.
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¿Qué es la timidez?
La timidez es, ante todo, una característica de personalidad. Las personas que son tímidas no se sienten cómodas exponiéndose en público, por lo que desenvolverse en situaciones sociales supone para ellas un esfuerzo mayor que para quienes no lo son. La timidez hace que la persona tienda a mantenerse reservada, sin interactuar con quienes están a su alrededor, ya que esto le produce cierto grado de ansiedad por temor a ser juzgada.
Cuando alguien posee una personalidad más bien tímida, tiende a adoptar una actitud reservada y prudente con los demás. Por ello, es habitual que estas personas prefieran relacionarse con grupos reducidos. La timidez no siempre se encuentra relacionada con el malestar psicológico. Hay personas tímidas que funcionan de manera adaptada en su vida cotidiana y movilizan recursos para lidiar con esas situaciones que les producen ansiedad.
Sin embargo, hay otras que verán limitada su habilidad para formar relaciones sociales, por lo que tenderán a llevar a cabo conductas de evitación que pueden derivar en un importante aislamiento. Así, la timidez no es reconocida como un trastorno psicopatológico, pues cuando esta se intensifica hasta llegar a extremos preocupantes podríamos estar hablando más bien de una fobia social.
La timidez como tal no tiene por qué suponer un problema, pues esta constituye, al fin y al cabo, un estilo de relación con los demás en el que prima la introspección y el control emocional frente a los demás. Aunque hoy en día ser tímido no está de moda, esta tendencia es más habitual de lo que parece. De hecho, todos los niños atraviesan una etapa de marcada timidez y miedo a los extraños entre los seis y doce meses, lo cual funciona como un mecanismo de protección para favorecer la proximidad con la figura de apego. Lejos de ser un trastorno psicológico, la timidez puede ser una forma de entender el entorno y adaptarnos a él desde la prudencia y la tranquilidad.
11 pautas para comunicarse con una persona tímida
Si tienes cerca a una persona tímida, puede que estas pautas te ayuden a conectar mejor con ella.
1. Evita actuar de forma invasiva
Las personas tímidas aprecian, como todo el mundo, a quienes se acercan a ellas en un tono amable y cercano. Sin embargo, a veces podemos caer en el error de ser muy efusivos e incluso invasivos, cuando la persona ni siquiera tiene tanta confianza con nosotros como para responder de la misma manera. En términos de comunicación menos es más, así que acércate a esa persona con naturalidad y apertura sin sobreactuar.
2. Rompe el hielo
Las personas tímidas son menos tendentes a iniciar las interacciones. Sin embargo, eso no significa que no deseen establecer una comunicación con los demás. Por eso, anímate a ser tú quien rompa el hielo y comience la conversación. No entres en pánico si esa persona te contesta con respuestas cortas, pues es natural que necesite algo de tiempo hasta soltarse y abrirse un poco más contigo. Recuerda, las personas tímidas pueden parecer a veces desagradables, pero es sólo una impresión.
3. Busca los puntos en común entre vosotros
Una forma excelente de conectar con alguien tímido puede ser buscar puntos en común. Seguramente tengáis intereses compartidos que pueden servir como punto de partida para conoceros más y estrechar lazos. Trata de ir en esta dirección y verás como enseguida la conversación se vuelve muy fluida e interesante.
4. Haz que se sienta útil o importante
Si la persona siente que puede ayudarte en algo o aportar cosas interesantes a la conversación, no dudes de que se abrirá mucho más deprisa. Por ello, siempre es buena idea preguntarle sobre un tema acerca del cuál sabe mucho, pedirle consejo sobre algo o recomendaciones sobre algún aspecto concreto. Si ya habéis conversado en otras ocasiones, puede ser buena idea recuperar temas o cosas que te haya comentado, ya que eso demostrará que le escuchas de manera genuina.
5. Respeta su espacio
Es posible que, intentando acercarte a esa persona, sólo contribuyas a crear más distancia. Si percibes que no se encuentra cómoda con la conversación o está algo nerviosa, es mejor que dejes de insistir sin agobiarla más. Recuerda no acercarte demasiado o mirar demasiado fijamente, ya que aunque tengas buenas intenciones estos gestos pueden intimidarla o hacerle sentir demasiado abrumada.
6. Di su nombre en la conversación
Puede parecer un detalle sin importancia, pero decir el nombre de la otra persona siempre ejerce un efecto positivo en la conversación. La comunicación se hace más cercana, el otro se siente importante y, en definitiva, se fomenta la conexión.
7. No le juzgues
Como comentábamos al inicio, muchas veces las personas tímidas tienen mala fama y son tachadas como bordes, sosas, maleducadas o desagradables. Sin embargo, muchas veces su comportamiento se debe a su carácter retraído, que no provoca la mejor impresión. Es importante que trates de ser empático y no juzgues muy rápido, pues esa persona probablemente necesite un tiempo hasta poder ser ella misma al cien por cien contigo.
8. Utiliza las redes sociales a tu favor
Es relevante tener presente el papel de las redes sociales cuando se trata de interactuar con una persona tímida. Las personas con este estilo de relación pueden sentirse más cómodas al principio detrás de la pantalla. Por ello, puedes recurrir a las redes sociales para tener más conversación. Esto permitirá acelerar la conexión con esa persona en un entorno que para ella es más seguro.
9. Evita conversar solo para llenar el silencio
Conectar con una persona tímida implica algo más que simplemente llenar el silencio con conversaciones vacías. Evita tocar temas superficiales por decir algo, ya que con esto sólo arecentarás la incomodidad. En su lugar, es preferible que te impliques de manera genuina en la conversación, hablando acerca de temas más profundos e interesantes que sean del agrado de esa persona.
10. Apuesta por las preguntas abiertas
Si basamos la conversación en preguntas cerradas, no dejaremos mucho margen para que esa persona se explaye. Es decir, sólo obtendremos respuestas concretas con monosílabos. Por eso, es mucho más fácil que la comunicación fluya si apuestas por preguntas abiertas en las que la respuesta puede ser mucho más amplia.
11. Trata de manejar los silencios
Los silencios en la conversación son siempre motivo de incomodidad para cualquiera, pero aún más si se es tímido. Por ello, si esto ocurre trata de tener en mente temas comodín que te ayuden a mantener la dinámica de la charla. Si hay más personas cerca, incluso puedes tratar de incluir a alguien más en vuestra conversación. A veces, algo tan simple como comentar lo que estáis haciendo es de utilidad. Si estáis en un restaurante podéis hablar de la comida, si coincidís en clase sobre las materias o, si os habéis encontrado en la calle, sobre el lugar de donde venís cada uno.
Conclusiones
En este artículo hemos hablado acerca de algunas claves que pueden ser de ayuda para conectar de forma natural con una persona tímida. La timidez está normalmente mal vista, pues quienes tienen esta forma de ser suelen ser tachados como maleducados, desagradables o sosos. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Ser tímido no tiene nada de malo, es un estilo de relación tan válido como el de los extrovertidos. No obstante, conectar con alguien tímido al inicio puede ser un poco difícil, por lo que algunas claves pueden ser de ayuda.
Es recomendable que rompas el hielo y muestres una actitud amable y cercana, aunque sin resultar demasiado invasivo. Recuerda manejar los silencios, hacer preguntas abiertas o sacar temas interesantes que sean del agrado de ambos. Evita juzgar y sé empático, apostando por temas de conversación profundos e interesantes en lugar de conversaciones banales. Haz que esa persona se sienta útil e importante y respeta su espacio personal, ya que puede sentirse abrumada con demasiado contacto o cercanía.
