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La Navidad es una época de celebración, alegría y tiempo con los seres queridos. Sin embargo, estas fiestas también son un momento de excesos, gastos y consumismo desmedido. Por ello, una vez que el espíritu navideño se esfuma y se vuelve a la normalidad, es habitual experimentar la llamada cuesta de enero. Con el comienzo del nuevo año también vivimos la resaca festiva y debemos gestionar mejor que nunca nuestros gastos.
Aunque quizá te parezca imposible, lo cierto es que hay algunas claves muy interesantes que pueden ser de ayuda para sobrevivir a estos momentos en los que urge apretarse más el cinturón. En este artículo vamos a conocerlas.
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14 pautas psicológicas para sobrevivir a la cuesta de enero
Antes de nada, es importante hablar acerca de qué es la cuesta de enero. Este fenómeno económico se produce debido a dos razones esenciales. Por un lado, el manejo deficiente de las finanzas personales. Por otro lado, el incremento en el precio de diferentes productos y servicios que aparece a comienzos de año. Aunque no podemos controlar aspectos como la inflación, si que tenemos la posibilidad de mejorar la manera en la que gestionamos la economía doméstica.
Las fiestas navideñas suelen constituir un momento de elevado desembolso económico. Las celebraciones, los regalos… hacen mella en nuestro bolsillo. Tener conocimientos básicos sobre finanzas nos puede ayudar a manejarnos mejor en este sentido, planificar y reducir gastos innecesarios que marcan la diferencia. A continuación, comentaremos algunas de las claves psicológicas más útiles para sobrevivir a la cuesta de enero.
1. Evita exponerte a la publicidad en la medida de lo posible
Durante este momento del año es frecuente que aparezcan numerosos spots y anuncios publicitarios que promocionan ofertas y rebajas. Este tipo de contenido es mucho más poderoso de lo que puede parecer, ya que nos tienta con supuestas gangas que creemos que no podemos dejar escapar. Así, surgen en nosotros necesidades y deseos nuevos que hasta entonces no habíamos tenido.
Por ello, es altamente probable que tengamos gastos imprevistos y también innecesarios que no hacen más que dificultar el ahorro y el gasto responsable. Lo mejor que puedes hacer para evitarlo es exponerte lo mínimo posible a este tipo de publicidad. Por ejemplo, trata de entrar menos en tus redes sociales, donde influencers seguramente te bombardearán con anuncios y códigos de descuento.
2. Fija un límite de gasto
Sobrevivir al mes de enero es más sencillo si te fijas límites de gasto. Si no marcas límites en tu desembolso, lo esperable es que tu cartera se resienta. Puedes establecer un gasto máximo mensual e incluso puedes establecer un tope semanal para que la medida sea más efectiva.
3. Ve a comprar con una lista
La improvisación no suele ser una buena idea cuando se trata de ahorrar. Por eso, lo más aconsejable a la hora de comprar es optar por realizar una lista previamente. A la hora de hacer una buena lista de la compra, te puede ayudar el organizar los menús semanales de forma que sólo te hagas con aquellos productos que realmente necesitas. Recuerda hacer un inventario de lo que tienes en casa, ya que así evitarás tener productos duplicados que pueden echarse a perder. Añadido a esto, tu gasto también se verá reducido si apuestas por consumir productos de temporada y locales.
4. No acudas al supermercado con hambre
Quizá te parezca una tontería, pero lo cierto es que ir a la compra con apetito hace que gastemos más de lo necesario. Tener hambre mientras recorremos los pasillos repletos de productos no sólo nos hace comprar más cantidad, sino también incluir en la cesta productos que en circunstancias normales no compraríamos. Para evitar esto, la solución es sencilla. Procura ir a la compra con el estómago lleno, pues de esta forma comprarás de forma racional en lugar de dejarte llevar por tus impulsos del momento.
5. Reflexiona acerca de por qué compras ciertos productos
Los supermercados están llenos de ofertas y productos con un márketing que los hace deseables y apetecibles. Esto hace que muchas veces compremos ciertas cosas que realmente no necesitamos. Cuando vayas a comprar un alimento, pregúntate para que los vas a utilizar, si su precio se ajusta a lo que te puedes gastar y si realmente lo necesitas o te estás dejando llevar por la publicidad.
6. Predica con el ejemplo
Si tienes hijos, enseñarles a gestionar bien las finanzas pasa por predicar con el ejemplo. Eres un modelo de conducta para ellos, por lo que mostrarles la relevancia de gastar con cabeza es esencial para que ellos también colaboren en el tránsito de la cuesta de enero. Educarles en este sentido también les ayudará a tomar conciencia del valor de las cosas y esto evitará que pidan continuamente comprar cosas demasiado caras o innecesarias.
7. Apuesta por ir al mercado
A la hora de adquirir productos frescos, acudir al mercado siempre es la mejor alternativa. Por un precio similar, conseguirás alimentos de calidad muy superior. Además, con esta práctica estarás aportando tu granito de arena para que la economía local siga funcionando.
8. Evita comprar en compañía
Cuando se acude a comprar en compañía de otras personas, parece que tendemos a comprar más de lo habitual. Por ello, cuando te toque ir al supermercado o a otro tipo de tiendas es mejor que lo hagas en solitario. De esta forma, podrás ir al grano y adquirir sólo esas cosas que realmente necesitas evitando caprichos o compras impulsivas.
9. Trata de hacer todas tus compras en el mismo lugar
Otra estrategia muy útil para fomentar el ahorro en las compras tiene que ver con concentrar todas ellas en el mismo establecimiento. Esto se debe a que, cuando realizamos nuestros recados en lugares dispersos, nos cuesta mucho más tener conciencia de lo que estamos gastando. Por ello, es más probable acabar desembolsando más dinero del que se había previsto. En cambio, si haces todas tus compras en un único sitio, tendrás total control del dinero que has gastado.
10. Paga en efectivo
Cuando realizamos nuestros pagos con tarjeta, generalmente tendemos a gastar más. El hecho de que todo esté digitalizado nos hace ver el gasto como algo más abstracto y, por ello, asumimos que tenemos más margen del que creemos. En cambio, el efectivo es muy visual y nos hace ver de forma más concreta el dinero. Aunque cada vez es más difícil manejarse con efectivo, prueba a utilizar esta estrategia si crees que estás gastando demasiado este mes de enero.
11. Cuidado con los descuentos
Generalmente, los descuentos se nos ofrecen en los supermercados como una forma de ahorrar y comprar más eficientemente. Sin embargo, te sorprenderá saber que los descuentos no buscan ayudar al consumidor, sino incrementar las ventas de las empresas. Por ello, muchas veces los descuentos acaban jugando en nuestra contra porque nos hacen incluso adquirir productos que a priori no habíamos pensado en comprar.
12. Monitoriza tu situación financiera
Mantener un control frecuente de tu situación financiera es otra manera de sobrellevar esta cuesta de enero. Tener conocimiento de tus cuentas, tus gastos e ingresos, te ayudará a tener más conciencia del dinero del que dispones y los gastos que puedes permitirte. Este monitoreo es clave para ser algo más racionales en nuestras adquisiciones, dejando las emociones y los impulsos en un segundo plano.
13. Evita las zonas en color rojo
Puede que esto te suene algo raro, pero lo cierto es que la ciencia del marketing conoce bien las asociaciones entre los colores y las emociones. Por ello, las tiendas y grandes superficies suelen recurrir a los tonos rojos porque estimulan el apetito y el deseo de comprar. Si estás buscando ahorrar este mes de enero, será mejor que te alejes de esas áreas repletas de carteles que ofrecen rebajas y descuentos con grandes letras escarlata.
14. Establece prioridades
Intentar ahorrar no tiene por qué significar vivir bajo mínimos o carecer de cosas esenciales. En su lugar, tiene más que ver con establecer prioridades y revisar qué gastos son importantes y cuáles se pueden posponer. También implica detectar esos pequeños gastos que damos por sentado y quizá son prescindibles. De esta manera, notarás más diferencia de la que crees. Revisa posibles suscripciones mensuales, gastos pequeños que no contabilizas y suman mucho al final del mes, caprichos…
Conclusiones
En este artículo hemos hablado acerca de algunas claves psicológicas que pueden ayudarnos a sobrellevar la temida cuesta de enero. Tras las fiestas de Navidad, la mayoría de los mortales ven sus cuentas a mínimos. Los gastos de la época asociados a los regalos y las celebraciones pasan factura y es momento de encarar el nuevo año con una buena estrategia financiera. El manejo de la economía doméstica resulta muy importante para aprender a comprar, utilizar la razón y no la emoción a la hora de adquirir productos y monitorizar los gastos e ingresos que tenemos. Solo de esta manera podemos identificar gastos innecesarios y hacer compras más responsables y eficientes.
