-small.jpg&w=96&q=75){kind=small}
Es innegable que la variedad de ecosistemas en nuestro planeta Tierra es inmensa. Y es precisamente gracias a esta diversidad de biomas que nuestro mundo está en un equilibrio lo suficientemente perfecto como para hacer posible la existencia de vida. Una vida que, evidentemente, está perfectamente adaptada a los distintos climas.
La adaptación es el motor de la evolución de las especies. Cada ecosistema tiene unas características geológicas, climatológicas y biológicas distintas, de ahí que, en la carrera de la selección natural, las especies hayan tenido que adaptarse a los distintos parajes del mundo.
Y de entre todos los ecosistemas, si hay unos que son parte de la identidad de la Tierra, estos son, sin duda, los bosques. Representan el 30% de la superficie terrestre, lo que vendría a ser unas 4.000 millones de hectáreas. Y de entre los distintos bosques, el tropical es el más rico en lo que a vida animal y vegetal se refiere.
El bosque tropical es un bioma que nace de la unión de ecosistemas boscosos con diferencias muy marcadas entre las épocas de lluvia y las de sequía. Y alberga algunos animales extraordinarios que presentaremos en el artículo de hoy, emprendiendo un viaje hacia los bosques tropicales de la Tierra.
- Te recomendamos leer: “Flora y fauna de la sabana (y sus características)”
¿Qué es un bosque tropical?
Un bosque tropical es un bioma boscoso que consiste en acumulaciones vegetales situadas en zonas cercanas al ecuador de la Tierra con un clima basado en una temperatura estable a lo largo de todo el año (y por encima de los 24 °C) y con unas lluvias abundantes, condiciones que alberguen una biodiversidad mayor que cualquier otro ecosistema del planeta.
Podemos encontrar una vegetación muy frondosa, son ricos en árboles muy altos con fuertes troncos y grandes enredaderas, temperaturas altas y constantes (oscilan entre los 20 °C y los 30 °C) y se extienden entre el trópico de Cáncer (hemisferio norte) y el trópico de Capricornio (hemisferio sur).
Los bosques tropicales pueden ser secos (alterna épocas lluviosas y de sequía), monzónicos (con una época de intensas lluvias) o puramente tropicales (con lluvias abundantes todo el año, conocidos también como selvas tropicales). Por lo tanto, la humedad varía mucho dependiendo del bosque en cuestión. Aun así, las precipitaciones, en general, se sitúan en torno a los 750 - 2.000 milímetros anuales.
Por su abundante vegetación estos bosques tropicales generan enormes cantidades de oxígeno y, a su vez, almacen hasta el 50% del dióxido de carbono, además de absorber el calor para ayudar a mantener estable la temperatura global del planeta. Por desgracia, el cambio climático y la deforestación están amenazando su integridad.
Son bosques muy frondosos y de alta altura que se extienden cientos de kilómetros, estando presentes en América del Sur, África del Este, Asia menor y América Central, a unas altitudes de, generalmente, unos 1.200 metros por encima del nivel del mar.
- Te recomendamos leer: “Los 23 tipos de bosques (y sus características)”
¿Qué animales habitan los bosques tropicales?
La biodiversidad en los bosques tropicales es mayor que en cualquier otro ecosistema de la Tierra. Encontramos una enorme diversidad de insectos, mamíferos, anfibios, reptiles, aves… Esto se hace especialmente notorio en la selva tropical (el bosque tropical con lluvias todo el año), las cuales, pese a ocupar menos del 7% de la superficie terrestre, alberga más del 50% de especies animales del mundo. De hecho, en una sola hectárea podemos encontrar 42.000 especies distintas de insectos.
Sabiendo que nos dejaremos a asombrosos animales en el tintero, codo a codo con nuestro equipo de zoólogos hemos preparado una selección de los animales más increíbles que habitan los bosques tropicales de la Tierra. Esta es la fauna más asombrosa del bosque tropical.
- Te recomendamos leer: “Los 15 animales más raros del mundo (con fotos)”
1. Mono aullador
El mono aullador, cuyo género de nombre científico es Alouatta, es una especie de primate que habita los bosques tropicales del continente americano, desde el sur de México hasta el noreste de Argentina. Estos monos tienen el rostro corto y las narinas, achatadas y separadas. Sin contar la cola, miden entre 56 y 90 cm de longitud.
Habitan las zonas altas de los árboles en grupos de entre 4 y 19 ejemplares. Su nombre procede de los aullidos que emiten para marcar el territorio. Unos sonidos similares a un fuerte viento atravesando un túnel que pueden oírse a casi 2 km a la redonda.
2. Rana dardo dorada
La rana dardo dorada, de nombre científico Phyllobates terribilis, es un anfibio endémico de los bosques tropicales de la costa pacífica colombiana que tiene el honor de ser el segundo animal más venenoso del mundo. Con apenas 5 centímetros de longitud, dispone de unas glándulas sebáceas que segregan un veneno conocido como batracotoxina, el cual destruye las terminaciones nerviosas.
No hay tratamiento ni antídoto y en su piel hay suficiente toxina como para matar a 1.500 personas adultas. Y por si esto no fuera suficientemente aterrador, hay casos de muertes que se han producido sin ni siquiera tocar a la rana, sino simplemente por entrar en contacto con una superficie por la que esta había pasado y que había quedado impregnada de la toxina.
- Te recomendamos leer: “Los 20 animales más venenosos que existen”
3. Anaconda
No podemos olvidarnos de los reptiles. La anaconda, de nombre científico Eunectes murinus, es una serpiente constrictora de la familia de las boas endémica de los ríos de los bosques tropicales de América del Sur. Con una longitud que puede llegar a ser de 10 metros, es el décimo animal más grande del mundo, compitiendo con la pitón reticulada por el título de “serpiente más grande de la Tierra”.
Al ser una serpiente constrictora, no mata a través de una mordedura venenosa, sino que se vale de sus 85 kg de peso para asfixiar a sus presas con una fuerza que puede llegar a ser de 1.000 kg, haciendo que estas mueran por falta de aire. Posteriormente, rompe sus huesos y la engulle. No hay ni un solo animal que resista su abrazo.
4. Okapi
El okapi, de nombre científico Okapia johnstoni, es un mamífero artiodáctilo considerado como un “fósil viviente”, siendo el pariente vivo más próximo a las jirafas. Es oriundo de los bosques tropicales del Congo y, con su longitud de entre 1,9 y 2,5 metros, parece una mezcla entre una jirafa y un caballo. Es un animal único en la Tierra.
Por desgracia, estos tímidos y huidizos animales que pesan hasta 300 kg y que son exclusivamente herbívoros se encuentran en peligro de extinción. Se alimentan de más de 100 especies diferentes de plantas (algunas de ellas, tóxicas para nosotros) y su esperanza de vida es de unos 30 años.
5. Perezoso bayo
El perezoso bayo, de nombre científico Bradypus variegatus, es una especie de perezoso tridáctilo oriundo de los bosques tropicales de América del Sur y América Central. Es un animal que mide entre 42 y 80 centímetros y que pesa entre 2,2 y 6,3 kg. Durante la estación de apareamiento, las hembras, para atraer a los machos, emiten unos lamentos fuertes y estridentes que suenan como “ay ay”. De ahí que también se conozca como aí.
Vive en los árboles y se desplaza muy lentamente. Tanto que en una hora apenas recorre 200 metros. Es tan lento que su pelaje adquiere una coloración verdosa de las algas que crecen sobre su pelo. Esto se debe a un muy lento metabolismo, el cual lo lleva también a tardar más de un mes en digerir una sola comida.
6. Guacamaya roja
La guacamaya roja, de nombre científico Ara maco, es una de las especies más famosas de los bosques tropicales, siendo oriunda de América del Sur y América Central. Puede llegar a alcanzar 90 cm de longitud y un peso de 1 kg. Es un ave de la familia de los psitácidos que destaca por su plumaje de colores vivos donde predomina el rojo escarlata. Es un animal muy social y uno de los pocos endogámicos, con una “pareja” de por vida.
7. Capibara
La capibara, de nombre científico Hydrochoerus hydrochaeris, es un roedor de la familia de los cávidos que habita los bosques tropicales de América del Sur. Se trata del roedor más grande (puede alcanzar una longitud de 1,30 metros) y pesado (puede llegar a pesar 66 kg) del mundo. Tiene muchos depredadores naturales y es frecuente que se esconda de ellos en el agua, donde puede aguantar la respiración hasta 5 minutos.
8. Mariposa morfo azul
No podíamos no hablar de insectos. La mariposa morfo azul, de nombre científico Morpho peleides, es una mariposa oriunda de los bosques tropicales de América del Sur y América Central. Es un animal cuya coloración azul cobalto se debe a la iridiscencia, un fenómeno óptico a través del cual percibimos un color no por un pigmento, sino por cómo incida la luz y observemos una superficie (en este caso, las millones de escamas en sus alas). Pueden llegar a medir hasta 20 centímetros de envergadura.
9. Gran zorro volador
Sí, esto existe. El gran zorro volador, de nombre científico Pteropus vampyrus, es una especie de murciélago que habita los bosques tropicales de Asia menor. Pertenece a la familia de los murciélagos frugívoros y es el más grande (su apertura alar puede llegar a ser de 1,80 metros). Pero no te preocupes, se alimenta exclusivamente de frutos, flores, néctar y polen. A diferencia de otros murciélagos, no tiene la habilidad de la ecolocalización, pero sí un buen sentido de la vista.
10. Águila come monos
Su nombre lo dice todo. El águila come monos, de nombre científico Pithecophaga jefferyi, es una especie de ave accipitriforme oriunda de los bosques tropicales de Filipinas. En este ecosistema, es el ave rapaz más grande, pudiendo llegar a pesar 7 kg y a tener una envergadura de hasta 2 metros. Su nombre viene de las historias de los nativos, que decían que se alimentaba exclusivamente de monos.
Aun así, posteriormente se descubrió que, si bien cazaba primates, también se alimentaba de serpientes, lémures, otras aves o lagartos. Por este motivo, actualmente es más conocida como águila filipina. Aunque no nos engañemos, “águila come monos” queda mucho mejor. Por desgracia y pese a su esperanza de vida de hasta 60 años, a día de hoy apenas quedan 370 ejemplares, por lo que está en serio peligro de extinción.
