Trastorno Narcisista de la Personalidad: causas, síntomas y tratamiento

Seguramente hayas conocido a lo largo de tu vida a una persona que actúa de manera egocéntrica y arrogante, con tendencia a creerse superior a los demás y a ignorar aquello que sienten y piensan. Lo que quizá no te hayas imaginado es que algunas de las personas que encajan en este perfil sufren un trastorno psicológico conocido como trastorno narcisista de la personalidad.

En general, los trastornos de la personalidad constituyen un grupo de patologías mentales que se caracterizan por patrones permanentes de experiencias internas que se desvían de lo esperable de acuerdo con el marco social y cultural de la persona. Se trata de un fenómeno grave, pues se verán afectados aspectos centrales del individuo como los pensamientos, las emociones o el control de impulsos.

Generalmente, este tipo de patrones desadaptativos comienzan a desarrollarse en la adolescencia o la edad adulta temprana y son inflexibles, estables y permanentes en el tiempo. Por todo ello, son causa de un importante malestar y deterioro a todos los niveles Debido a la importancia que tiene conocer de cerca este problema psicológico, en este artículo vamos a comentar las causas, síntomas y tratamiento del trastorno narcisista de la personalidad.

• Te recomendamos leer: "Las 5 diferencias entre narcisismo y egocentrismo (explicadas)"

¿Qué es el trastorno narcisista de la personalidad?

El trastorno narcisista de la personalidad se caracteriza por la prepotencia exagerada, la falta de empatía y la necesidad de admiración. La persona narcisista muestra unos marcados aires de grandiosidad y valora más que nada el poder, el prestigio y la vanidad. Por ello, es común que exijan a los demás un trato y derechos especiales. Con frecuencia, se confunde esta condición con una elevada autoestima.

Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Una autoestima adecuada no tiene nada que ver con creerse más importante que el resto o negar los propios defectos. Por el contrario, significa aceptarse a uno mismo de forma compasiva, sin necesitar la admiración o atención continua de los demás. Las personas narcisistas tienden a vivir continuamente infelices y frustradas, pues no reciben el tratamiento especial de los demás. Esto salpica todas las esferas de la vida de la persona (laboral, personal, social…) y merman sus relaciones sociales.

Lejos de limitar este tipo de comportamiento a su entorno de confianza, las personas narcisistas suelen adoptar su actitud de grandiosidad en cualquier entorno en el que se encuentren. Aunque a priori pueden resultar atractivas por su derroche de autoconfianza, pronto aparece su peor cara, pues enseguida se hace evidente su deseo de ser el centro constante de atención. El deseo de poder puede hacer que surjan problemas económicos, ya que se produce un gasto excesivo de dinero en bienes de lujo como ropa, coches, joyas, etc.

Este derroche se justifica debido a que se encuentran convencidos de merecer tales objetos, pues son una confirmación del estatus que creen tener. El narcisismo también se hace notable en el discurso de la persona, que siempre es autorreferencial. El individuo no duda en hablar asumiendo que su opinión e ideas son las únicas válidas, lo que hace que surjan profundos conflictos con quienes las rebaten.

Aunque pueda parecer que esta actitud es algo banal e incluso cómico, lo cierto es que convivir con alguien con este trastorno de la personalidad puede llegar a ser profundamente desgastante. Por ello, los familiares y amigos muchas veces pueden verse en una tesitura difícil, sin saber cómo actuar por temor a detonar la rabia de la persona narcisista. En caso de conflicto, esta no dudará en vengarse y herir a los demás, ya que esto incrementará su sentimiento de control y superioridad sobre ellos. En definitiva, cualquier persona que se ponga de por medio en su deseo de mostrarse mejor que los demás será vista como un enemigo que tratará de hundir a toda costa.

• Te recomendamos leer: "Los 15 tipos de Narcisismo (y sus características)"

Síntomas del Trastorno Narcisista de la Personalidad

A continuación, repasaremos algunos de los síntomas principales del trastorno narcisista de la personalidad.

• Sentirse solo en sintonía con personas de alto estatus.
• Predominio de fantasías sobre éxito y poder.
• Necesidad de recibir atención y admiración continua de los demás.
• Sobrevaloración de los propios logros y cualidades.
• Sentirse con derechos o privilegios.
• Envidia de los demás, especialmente cuando consiguen logros. A la vez, creencia firme de que los demás le tienen envidia.
• Establecimiento de metas poco realistas.
• Arrogancia, actitud altiva.
• Deseo de poder.
• Intolerancia a la vergüenza, indignación y humillación.
• Expectativas desajustadas del tratamiento que recibirán de los demás.
• Pensar y hablar únicamente de sí mismo.

Causas del Trastorno Narcisista de la Personalidad

No hay una única causa definida del Trastorno Narcisista de la Personalidad. Por el contrario, este fenómeno resulta de la confluencia entre factores ambientales y genéticos. A nivel genético, las investigaciones realizadas al respecto parecen indicar que las personas con personalidad narcisista tienen menos materia gris en la ínsula izquierda, región del cerebro implicada en la empatía, la compasión y la regulación emocional. A nivel ambiental, son varios los factores que pueden favorecer el desarrollo de este trastorno de la personalidad:

• Aprendizaje de conductas manipulativas de padres o amigos.
• Haber recibido excesivos elogios por parte del entorno cuando se producen comportamientos adecuados, a la vez que se han criticado duramente conductas inadecuadas.
• Haber sufrido abuso o negligencia durante la infancia.
• Estilo educativo inadecuado, por el que los padres tienden a consentir todo sin poner normas ni límites.

Tratamiento del Trastorno Narcisista de la Personalidad

El tratamiento de elección para el trastorno narcisista de la personalidad es la psicoterapia. Gracias a ella, la persona afectada por este problema puede aprender nuevas formas de relacionarse con los demás de forma saludable y satisfactoria, además de ganar mayor comprensión de sus emociones y las de los demás. Por desgracia, muchas personas con trastorno narcisista carecen de un diagnóstico y, por ello, no reciben la ayuda profesional que necesitan. Entre los beneficios que la terapia psicológica puede proporcionar a los pacientes con trastorno narcisista podemos destacar:

• Mejora en la actitud que se adopta con los conocidos.
• Mantenimiento de las relaciones personales.
• Reconocimiento de las propias fortalezas y debilidades y mayor tolerancia a las críticas y fracasos.
• Mejora de la gestión emocional.
• Ajustar la autoestima, entendiendo esta como aceptación plena de uno mismo.
• Marcar metas realistas que permitan crear un plan de vida adecuado.

No podemos perder de vista que los trastornos de personalidad constituyen un fenómeno estable que no se puede revertir por completo. Sin embargo, la terapia sí permite aprender a manejarlos para lograr que la persona disfrute de una mejor calidad de vida. En general, los cambios con la intervención psicológica suelen ser lentos y pueden ser necesarios varios años de trabajo para modificar el comportamiento del paciente. Sin embargo, cuando la psicoterapia se realiza de forma continuada puede lograr grandes mejoras y favorecer que la persona acepte la responsabilidad de sus actos así como aprender modos de relacionarse más adecuados.

Las propias características del trastorno narcisista pueden hacer difícil la adherencia de los pacientes a la terapia, que pueden sentirse amenazados en su interacción con el profesional. Pueden ver la terapia como una pérdida de tiempo y plantearse abandonarla. Durante el curso de la terapia, pueden ser de ayuda algunas pautas para favorecer que la persona se encuentre estable y lo menos tentada posible a abandonar:

• Evitar consumo de drogas y alcohol.
• Practicar ejercicio al menos tres veces por semana, pues esto contribuirá a mejorar el estado de ánimo.
• Practicar técnicas de relajación para reducir el estrés y la ansiedad.

En el pasado se consideraba que la psicoterapia en formato grupal no era adecuada para las personas con personalidad narcisista, debido a sus carencias en términos de empatía y capacidad para conectar con otras personas de manera genuina. Sin embargo, en los últimos años los estudios han demostrado que la terapia grupal sí puede ser beneficiosa para estas personas al brindarles un entorno seguro donde hablar abiertamente de sus sentimientos con otros individuos que se encuentran en una situación similar, lo que puede favorecer la toma de conciencia de sus problemas.

Conclusiones

En este artículo hemos hablado acerca del Trastorno Narcisista de la Personalidad, un problema psicológico por el cual el individuo afectado tiende a creerse superior a los demás, desea continuamente ser el centro de atención y muestra una creencia firme de que posee más derechos y privilegios que el resto. Además, la persona narcisista suele ser muy conflictiva y tiende a vivir frustrada al ver que quienes le rodean no le brindan el trato que espera.

Igualmente frecuentes son los problemas económicos, derivados de un derroche en bienes y productos de lujo que hagan justicia a su “grandiosidad”. Si bien esta actitud puede resultar extravagante e incluso cómica, lo cierto es que convivir con una persona narcisista puede llegar a ser muy doloroso. Por ello, siempre es pertinente que estas personas puedan recibir un diagnóstico y ayuda de un profesional de salud mental. La psicoterapia es el tratamiento de elección en estos casos, permitiendo a la persona tomar mayor responsabilidad de sus actos, mejorar sus relaciones con los demás y comprender mejor sus emociones y las de los otros. Además del formato individual, la terapia grupal también puede ser beneficiosa para estos pacientes.